La iniciativa busca garantizar la conservación del arbolado urbano y las áreas verdes como respuesta al cambio climático.
Santo Domingo, D.N. – La diputada del partido Fuerza del Pueblo por la provincia de Santiago, Llaniris Espinal, sometió ante el Congreso Nacional el proyecto de ley de Ciudades Verdes, Sostenibles y Resilientes, con el objetivo de fomentar, proteger y garantizar la conservación del arbolado urbano y las áreas verdes en el país.
Espinal destacó que la aprobación de esta ley marcaría un hito en la protección y expansión de los espacios verdes urbanos, asegurando que las ciudades dominicanas sean más saludables y sostenibles.
“Este proyecto introduce aspectos innovadores que transformarán la planificación urbana y el manejo de nuestras áreas verdes”, expresó la legisladora.
La diputada explicó que, en los últimos 50 años, más del 70% de la población dominicana ha migrado del campo a la ciudad. Según el Décimo Censo Nacional de Población y Vivienda 2022, el 78.7% de los dominicanos reside en zonas urbanas, lo que ha generado desafíos ambientales y urbanos.
“El cambio climático representa una amenaza creciente para nuestras ciudades, que cada vez son más calurosas debido al aumento de la temperatura.
El arbolado urbano y las áreas verdes juegan un papel crucial en la mitigación de sus efectos, regulando la temperatura, reduciendo la contaminación y aumentando la resiliencia urbana”, puntualizó Espinal.
El proyecto de ley incorpora medidas clave para garantizar la sostenibilidad de las ciudades dominicanas.
Por primera vez, los árboles serían reconocidos legalmente como seres vivos con derechos, incluyendo el derecho a la vida, al desarrollo y a un entorno sano, con la protección del Estado.
También se propone la implementación de una «Mancheta Vegetal», mediante la cual cada municipio deberá desarrollar una estrategia de forestación urbana basada en especies nativas, promoviendo la biodiversidad y la adaptación al clima.
La iniciativa fomenta la participación ciudadana en la gestión de espacios verdes, asegurando su conservación y uso adecuado.
Además, establece que todo nuevo proyecto urbano deberá incluir un árbol por cada 100 metros cuadrados, integrando la naturaleza en la planificación de las ciudades.
En caso de que un área verde sea modificada para una obra pública o privada, se deberá restituir una superficie igual o mayor dentro de la zona de influencia del proyecto, garantizando que no haya una pérdida neta de espacios verdes.
Como parte del proyecto, se creará un Fondo Municipal Ambiental, financiado por multas ambientales, para ser utilizado exclusivamente en la plantación, mantenimiento y creación de áreas verdes.
También se contempla la creación de un Registro Municipal de Prestadores de Servicios en Materia de Arbolado Urbano, que permitirá garantizar la calidad en servicios como poda, derribo y mantenimiento de árboles.
Otro punto destacado de la propuesta es la recuperación de las áreas de ríos y cuerpos de agua en zonas urbanas.
Se plantea la restauración de los 30 metros de ribera a ambos lados de los ríos, con la participación de autoridades municipales, empresas y organizaciones, asegurando su conservación y adecuado uso.
Espinal adelantó que iniciará un proceso de socialización del proyecto con autoridades municipales, organizaciones ambientales, comunitarias y empresariales, para generar consensos que fortalezcan la iniciativa.
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