Récord de nacionalizaciones de ciudadanos turcos en Alemania en 2024

Más de 22 mil personas de origen turco obtuvieron la ciudadanía alemana, duplicando la cifra del año anterior

Berlín, Alemania. – Alemania registró un aumento sin precedentes en la cantidad de ciudadanos turcos que obtuvieron la nacionalidad durante el año 2024, alcanzando un total de 22,525 personas, lo que representa un crecimiento del 110 por ciento en comparación con 2023, según cifras oficiales publicadas por la Oficina Federal de Estadística (Destatis).

Los ciudadanos de origen sirio siguen encabezando la lista de naturalizaciones, con más de 75,000 casos, pero el incremento entre los ciudadanos turcos es el más notable en términos porcentuales.

Turquía se posiciona así como el segundo país con más personas nacionalizadas en Alemania durante el presente año.

Cambios legales y contexto político impulsan las solicitudes

Las autoridades explican que este repunte se debe, en gran parte, a la reforma reciente de la Ley de Nacionalidad en Alemania, que ahora permite a los nuevos ciudadanos conservar su nacionalidad de origen, eliminando uno de los principales obstáculos para muchas personas de origen turco.

Además, factores como la búsqueda de estabilidad, mejores oportunidades laborales, acceso a educación superior y una mayor seguridad jurídica también han motivado a miles a solicitar la nacionalidad alemana.

Implicaciones para Alemania y Europa

El aumento sostenido en las naturalizaciones refleja una evolución significativa en la política migratoria alemana, y podría tener efectos en diversos ámbitos como la planificación social, el mercado laboral y el sistema educativo.

Expertos señalan que este fenómeno también tendrá impacto en países vecinos, al facilitar la movilidad de estos nuevos ciudadanos dentro del espacio Schengen y reforzar la identidad multicultural de Europa.

Una sociedad cada vez más diversa

Alemania continúa consolidándose como un país receptor de migración y ejemplo de integración multicultural.

El crecimiento de comunidades como la turca y la siria dentro del tejido social alemán plantea nuevos retos, pero también abre oportunidades para enriquecer la vida cultural, política y económica del país.