Dajabón.-El representante de la ONU en República Dominicana, Mauricio Ramírez Villegas, subrayó la urgencia de restablecer el orden y la estabilidad política y social en Haití, una nación que ha enfrentado numerosos desafíos en los últimos años.
La situación de inseguridad en el país caribeño ha sido motivo de preocupación tanto a nivel regional como internacional, y el envío de una fuerza multinacional de apoyo a la Policía haitiana se considera una medida importante para abordar la problemática.
Ramírez Villegas también hizo referencia a la importancia de aprender de las experiencias del pasado, especialmente en relación con la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en Haití (Minustah). Esta misión, que operó en Haití durante varios años, no estuvo exenta de críticas y controversias, y es fundamental tomar en cuenta las lecciones aprendidas para que cualquier acción futura sea efectiva y beneficie a la población haitiana.
El coordinador residente de la ONU en República Dominicana destacó que el objetivo del eventual envío de una fuerza de paz no es imponer soluciones desde el exterior, sino brindar apoyo y capacitación al cuerpo castrense haitiano.
Esto permitiría que las fuerzas locales tengan mayor capacidad de respuesta y puedan enfrentar de manera más efectiva a las bandas criminales que operan en el país. La colaboración y el diálogo con las autoridades haitianas son esenciales para abordar los problemas de inseguridad y conflictos políticos y sociales que afectan a la nación vecina, sostuvo Ramírez.
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