Gobernará el país por el período 2024-2028
Santo Domingo, 16 de agosto de 2024 – Luis Abinader tomó posesión este viernes como Presidente de la República Dominicana para un segundo mandato, en una ceremonia cargada de simbolismo y expectativas.
Ante la Asamblea Nacional, el mandatario reafirmó su compromiso con la democracia, la transparencia y el bienestar social, marcando el inicio de una nueva etapa en la que busca consolidar los avances de su primer gobierno y profundizar en reformas clave para el país.
El discurso de Abinader estuvo centrado en la continuidad de su proyecto de nación, destacando los logros alcanzados durante los últimos cuatro años.
Entre estos, mencionó el crecimiento económico sostenido, con un aumento del PIB que ha posicionado a la República Dominicana como una de las economías más dinámicas de la región.
Resaltó también la reducción de la pobreza y la inversión en infraestructura, como pilares de su gestión que han mejorado la calidad de vida de miles de dominicanos.
Uno de los anuncios más destacados de su intervención fue la propuesta de una reforma constitucional para limitar la reelección presidencial a dos periodos.
Esta medida, según Abinader, busca fortalecer la democracia y evitar la concentración del poder, garantizando una alternancia que permita la renovación constante de las ideas y liderazgos.
«La República Dominicana merece un sistema político que se ajuste a los tiempos modernos, donde el poder sea una herramienta para el servicio, no para la perpetuidad», expresó.
En la misma línea, el Presidente reiteró su compromiso con la independencia del Ministerio Público, una de las banderas de su primer mandato.
Abinader aseguró que seguirá protegiendo la autonomía de este órgano, y que presentará una reforma constitucional que haga de esta independencia una obligación inquebrantable.
«La justicia debe ser un espacio libre de influencias políticas, y eso solo se logra con instituciones sólidas y autónomas», agregó.
Además de las reformas políticas, Abinader enfatizó la importancia de continuar con la transformación social del país.
Anunció una serie de iniciativas orientadas a mejorar las condiciones laborales, entre ellas, una reforma integral del sistema laboral que promueva la competitividad y garantice los derechos de los trabajadores.
Esta reforma, dijo, será discutida con todos los sectores involucrados, buscando un equilibrio entre los intereses de los empleadores y los derechos de los empleados.
En materia de salud, el mandatario se comprometió a seguir fortaleciendo el sistema sanitario, asegurando que la cobertura y calidad de los servicios continuarán mejorando.
«La pandemia nos enseñó la importancia de un sistema de salud robusto y accesible. No podemos bajar la guardia; tenemos que seguir invirtiendo en la salud de nuestro pueblo», afirmó.
La educación también ocupó un lugar central en su discurso, con el anuncio de un nuevo plan de mejora educativa que incluirá una revisión del currículo escolar y la ampliación de la cobertura de la educación técnica y superior.
Abinader prometió seguir invirtiendo en la formación de los jóvenes dominicanos, preparando al país para los retos del futuro.
En cuanto a la seguridad ciudadana, el Presidente reconoció que aún queda mucho por hacer, pero aseguró que su gobierno continuará reforzando las estrategias de combate al crimen y mejorando las condiciones de la policía.
«La seguridad de nuestros ciudadanos es una prioridad. Vamos a seguir trabajando para que todos los dominicanos puedan vivir en paz y sin miedo», dijo.
El mandatario también se refirió a la política exterior, subrayando la importancia de mantener relaciones sólidas y respetuosas con todos los países, especialmente en un contexto global cada vez más interconectado.
Enfatizó la necesidad de fortalecer la cooperación regional y continuar defendiendo los intereses de la República Dominicana en el ámbito internacional.
Otro tema crucial abordado por Abinader fue el medio ambiente. Anunció nuevas medidas para combatir el cambio climático y proteger los recursos naturales del país, asegurando que su gobierno está comprometido con la sostenibilidad y el desarrollo responsable.
«El futuro de la República Dominicana depende de nuestra capacidad para cuidar nuestro entorno. Debemos actuar ahora para garantizar un país verde y habitable para las próximas generaciones», subrayó.
En el cierre de su discurso, Luis Abinader hizo un llamado a la unidad y al trabajo conjunto de todos los sectores de la sociedad.
«Este es un momento histórico para nuestra nación. Debemos dejar de lado las diferencias y trabajar juntos por un país más justo, próspero y democrático. Estoy seguro de que, con el esfuerzo de todos, lo lograremos», concluyó entre aplausos.
Con el inicio de este segundo mandato, Luis Abinader enfrenta el reto de consolidar su legado y responder a las expectativas de un pueblo que espera cambios profundos y duraderos.
Los próximos cuatro años serán decisivos para definir el rumbo de la República Dominicana y el lugar que ocupará en el escenario global.
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